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Cuando miramos a nuestro derredor lo que vemos es caos, desilusión, secuestros, pesquisas, infidelidades, quiebra, escasez, muerte, juicio, encarcelamiento, prisiones, enfermedad, afán, ignorancia, arrogancia, egoísmo, fatalismo, lujuria, injuria, religiones, opresiones. Los gobiernos tratan y no logran la paz ni controlar la matanza. Somos impotentes ante tanto caos. Separemos nuestros pensamientos y la mirada del caos del cual no tenemos control. En vez, démosle gracias a Dios por tantas cosas que aún podemos identificar como bendiciones. A Dios oro:
Gracias por la vida pues en la década de los noventas situaciones de salud amenazaron mi vivir y hoy puedo ver cómo tu mano y tu misericordia me guardaron durante esos días turbulentos.
Río ante la adversidad sabiendo que Dios tiene todo el control. El me dice yo te supliré “todo lo que tr falte conforme a sus riquezas en gloria”. El me dice todo lo puedes en Mí que te fortalezco y no importa la situación que esté pasando sus promesas son fieles y verdaderas.
Alabaré yo á Jehová conforme á su justicia, Y cantaré al nombre de Jehová el Altísimo. ¿Cómo no he de alabar a Dios si cambió mi lamento en baile? “Jehová es mi fortaleza y mi escudo: En él esperó mi corazón y fui ayudado, por lo que se gozó mi corazón, Y con mi canción le alabaré.”
Camino segura pues lámpara es a mis pies tu palabra y lumbrera a mi camino diciendo, esperanza mía y castillo mío. Mi Dios, en ti confío.
Ilumina mi vida con tu Palabra para que te sirva todos los días de mi vida porque tu ley es perfecta que convierte mi alma. Tu testimonio es fiel que me hace sabia. Tus mandamientos son rectos que alegran mi corazón. Tu precepto es puro que alumbra mis ojos. Que te desee todos los días de mi vida pues tus mandamientos son deseables más que el oro afinado y más dulce que la miel que destila del panal.
Adereza mesa delante de mí en presencia de mis angustiadores. Unge mi cabeza con aceite para que mi copa rebose. Gracias Señor que el bien y la misericordia me seguirán todos los días de mi vida pues en tu casa moraré por largos días.
Sustenta mis pasos en tus caminos para que mis pies no resbalen. Gracias Señor porque cuando mi pie resbala tu misericordia, oh Jehová, me sustentaba.
En el nombre poderoso de Jesús de Nazaret. Amén
Créditos:
- Fondo musical en versión audio de: Alexis Ortega, Dios ha sido bueno, de la producción musical Un Destello de tu Gloria
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